TUNNEL LINER
Tunnel Liner es utilizado para el revestimiento y construcción de túneles por debajo de carreteras, avenidas, calles y ferrocarriles, para construir colectores de aguas de lluvia, alcantarillas de drenaje transversal, transportadores de materiales, colectores sanitarios, pasos vehiculares, redes de servicios públicos y peatonales.
La alcantarilla metálica Tunnel Liner es una estructura construida por medio de placas de acero corrugadas que se ensamblan de manera simultánea y progresiva; su práctico diseño se presenta como gran opción frente a otros sistemas de tuneleo, pues la ejecución se puede realizar de manera subterránea en comparación con las obras a cielo abierto.
Las láminas corrugadas utilizadas en la construcción del túnel hacen que su construcción sea más fácil y rápida, permitiendo tener un mejor avance en la obra, se utilizan anclajes metálicos para asegurar la forma geométrica requerida en el proyecto y evitar riesgos de deformaciones y desmoronamiento.
Las láminas corrugadas de Tunnel Liner están galvanizadas bajo la norma ASTM A-123, con los más altos estándares de calidad, las cuáles se pueden producir en diferentes diámetros y formas. Su practicidad en obra permite trabajar de manera subterránea sin afectar al tránsito y evita la ejecución a cielo abierto.
Principales ventajas:
Facilidad y economía en el transporte:
Se suministra en paquetes estibados, ya que las láminas se acoplan una sobre otra, ocupando menor espacio que otro tipo de estructuras que ya vienen armadas.
Eficiencia en la manipulación:
No se requiere de equipo especial para la instalación de las placas, las cuales se ensamblan a medida que se va ejecutando la excavación. Una placa puede ser fácilmente cargada por dos trabajadores.
Fácil y rápida instalación:
Dependiendo de las condiciones particulares de la obra, cada frente de trabajo puede avanzar entre 2m y 3.5m por día y así mismo desde cada pozo de trabajo pueden lanzarse dos frentes, incluso aumentarse el rendimiento incrementando el número de pozos de trabajo.
Menos tamaño:
En los pozos de trabajo, su diámetro puede ser a partir de 1.5 veces el diámetro del túnel horizontal reduciendo al máximo los gastos en obra.
Eficiencia en el almacenaje:
Las láminas se acoplan una sobre otra ocupando menor espacio que otro tipo de estructuras que ya vienen armadas.
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